Elsa Edith es una agente de Policía Nacional Civil (PNC) que ha logrado llevar por más de 20 años su carrera entre la seguridad, la música, y su vida como madre de familia.
Al graduarse en la Academia de Policía estuvo destacada por más de 5 años en el Departamento de Petén, como parte del Núcleo de Reserva, en la Estación de San José, y Aldea Cadenas, posteriormente perteneció a las Fuerzas combinada, donde junto al Ejército de Guatemala realizaba las labores de seguridad ciudadana en los autobuses, como parte de la comisaría 11 y por 3 años formo parte de las Fuerzas Especiales.
Elsa comenta que ha sido un reto muy grande formar parte de la PNC porque al ser mujer debe de pegarse al nivel de trabajo de los compañeros policías.
Además que ha tenido que combinar su carrera como agente y madre de familia, porque tiene dos hijos, una adolescente de 18 años y un niño de 13.
Dentro de sus recuerdos, relata que cuando estaba destacada en Petén se convirtió en madre y tuvo que dejar a su bebé de 2 meses para incorporarse a sus labores.
“Ser madre y policía es bastante duro porque debemos de dejar a nuestros hijos por muchos días, el día que nos convertimos en madres empezamos una vida diferente, nos falta tiempo para nosotras, pero vemos la carita de nuestro bebé y esa ternura nos hace estar alegres y nos recuerda que la vida es maravillosa”, comentó Elsa.
Desde hace 10 años forma parte de la Subdirección General de Prevención del Delito y participa como cantante y compositora del combo musical de la institución policial.
Donde participa en las diferentes actividades de acercamiento comunitario, animando y llevando un mensaje de prevención a niños, niñas y padres de familia.
Como compositora ha compuesto dos canciones para la institución, dedicadas a la juventud y las mujeres, que llevan un mensaje que busca resaltar el valor de la mujer dentro de la sociedad para que se respete la vida y que no sean violentadas nunca más.
Su mensaje para las madres policías y madres del mundo, es seguir adelante y luchar por cumplir sus sueños, su pasión era trabajar como policía y 20 años después se siente orgullosa de su camino en la institución y de la vida de sus hijos.
Nota: Wendy Álvarez
Fotografía: Mingob