Menores y mujeres que carecen de amor y gratitud por parte sus familiares son blanco fácil de los líderes pandilleros, que se aprovechan de las vulnerabilidades y los hacen cometer crímenes, cobros de extorsión, descuartizamiento y amenazas, ante esto, las autoridades de la División Contra el Desarrollo Criminal de las Pandillas (DIPANDA) de la Policía Nacional Civil, hacen el llamado a no ceder ante las “Falsas ideologías que les hacen creer los cabecillas de las maras”.
García* jefe de DIPANDA, dijo que los Líderes de la Mara 18 y de la Mara Salvatrucha en los centros carcelarios, duermen en camas matrimoniales, con aire acondicionado, tienen estufa, refrigeradora, lavadora, televisiones, juegos entre otros ilícitos.
“Pero, los reclutados tienen alerta Alba-Keneth quienes huyen de sus casas, duermen en cuartos alquilados en el suelo, sin comida, sin ropa, baños y sobre todo con el miedo de las instrucciones que les girara el líder de la pandilla que será entre otras cosas, matar a quien no haya pagado la extorsión o a otro pandillero por quedarse con el dinero”, afirmó García *.
Además, el jefe de DIPANDA aseguró que los líderes de pandillas “hacen creer a las mujeres y niños que ellos lo son todo, que ellos son sus amigos, que los quieren y que nadie les dará lo les dan, pero en realidad les hacen daño, porque mientras los jefes gozan del todo el dinero que cobran, los seguidores deben aguarse a vivir en extrema pobreza”.
Las familias de los cabecillas de las maras, tienen a sus familiares viviendo en residenciales, con vigilancia y en buenas condiciones, pero no es lo mismo para las familias de los seguidores que deben buscar cómo llevar un plato de comida a su casa.
Lastimosamente, dentro de las acciones negativas de los pandilleros está el asesinato y descuartizamiento de mujeres cuando no entregar el dinero de la extorsión una o varias veces.
Nota: Flor Ortíz
Fotografía: Noe Medina
Video: Noé Medina/ E. Valdéz