Este 11 de mayo el Gobierno de Guatemala a través del Ministerio de Gobernación (Mingob) anunció que próximamente iniciará la implementación del Control Telemático en el proceso penal del país. Esta herramienta tecnológica contribuye al fortalecimiento del Régimen Penitenciario y la modernización del sector justicia, asimismo constituye una alternativa eficaz para el cumplimiento del arresto domiciliar o residencial.
En ese sentido, el Titular de la Cartera del Interior manifestó que han transcurrido siete años desde la publicación del Decreto 49-2016, del Congreso de la República de Guatemala, Ley de Implementación del Control Telemático en el Proceso Penal. “Luego de tres eventos de licitaciones precedidos de administraciones anteriores, hoy se logra concretar el Control Telemático como un resultado importante del Gobierno de Guatemala”, añadió.
“El dispositivo consiste en una tobillera que emitirá una señal permanente de la ubicación georreferenciada de su portador, hacia el Centro de Control Telemático de la institución. El incumplimiento de las disposiciones judiciales por parte de la persona portadora del mismo, tiene como consecuencia la revocación de la medida, el pago de una multa, pena de prisión y la inmediata captura, de acuerdo al criterio del órgano jurisdiccional competente”, reiteró el Ministro de Gobernación.
Por su parte, el Subdirector del Centro de Control Telemático del Mingob, señaló que el Dispositivo de Control Telemático (DCT), es un rastreador de ubicación que monitorea en tiempo real el comportamiento de las personas que portan el mismo, lo cual permite a las autoridades la activación inmediata de los protocolos de actuación ante alarmas o cualquier tipo de acontecimientos.
Procesos de implementación
El Ministro del Interior puntualizó que se tiene la disponibilidad de 2 mil dispositivos para que el Organismo Judicial (OJ), los utilice en la aplicación del Control Telemático en el proceso penal. “Esta tecnología ha sido implementada de forma progresiva en otros países, los cuales son referentes del respeto a los derechos humanos y las garantías constitucionales”, concluyó.
Estos dispositivos electrónicos que permiten la vigilancia permanente de las personas sujetas a un proceso penal tienen un sistema de alerta al intentar manipularlos. Cada uno pesa 68 gramos y se sujeta con correas de fijación a los tobillos, las cuales son de fibra óptica con un refuerzo de acero, para evitar puedan quitarse el mismo. Además, cuentan con la tecnología IP68, lo cual garantiza la protección del equipo contra el polvo o la inmersión al agua.
También cuentan con Servicios Basados en Localización (LBS, por sus siglas en inglés), lo cual permite utilizar información de su dispositivo móvil o Wireless Fidelity (Wifi, en inglés), así como del Sistema de Posicionamiento Global (GPS), para determinar la ubicación geográfica en tiempo real.
Nota: Alexander Girón
Fotos: Paulo Raquec y Javier Piedrasanta
Video: Audiovisual Mingob